Zorro Vulpes vulpes Infoormación: El zorro pertenece a la familia Canidae. En España fueron descritas las subespecies Vulpes vulpes silaceus (Miller, 1907) y Vulpes vulpes crucigera (Bechstein, 1789), aunque los últimos estudios señalan que en Europa no existen subespecies concretas. Sin embargo, sí que parece evidente la diferencia morfológica, al menos en cuanto a tamaño y pelaje, entre los zorros ibéricos meridionales y los septentrionales. Morfología: El zorro es del tamaño de un perro mediano, aunque con el cráneo alargado y con el perfil superior casi recto, hocico my puntiagudo y las orejas grandes y triangulares. La cola es larga y está densamente cubierta de pelo, por lo general con la punta blanca. Su pelaje es suave y espeso, de coloración amarillenta-rojiza hasta pardo-rojiza en sus partes superiores y blanca en las inferiores, y lo muda una vez al año (de primavera a otoño). La parte anterior de las patas y pies son negros. Su variación de color, tanto individual como geográfica, es amplia. Distribución: El zorro está presente en toda la superficie de la Península Ibérica, pero no vive en las Islas Baleares y Canarias. Su hábitat son principalmente las zonas boscosas, aunque también abunda en regiones abiertas e, incluso, en las proximidades de asentamientos humanos y basureros periurbanos, de los que se alimenta. Alimentación: La capacidad del zorro para incluir cualquier tipo de alimento en su dieta le permiten adaptarse a una gran diversidad de hábitats. Aunque su dieta también sufre variaciones geográficas (hay gran densidad de zorros cerca de basureros periurbanos y en zonas residenciales), son también importantes las variaciones estacionales. Reproducción El zorro puede ser monógamo o polígamo. El celo, que tiene lugar de diciembre a febrero (se adelanta en latitudes más bajas), viene marcado por un período de receptividad de las hembras que dura entre 2 y 3 días, aunque puede llegar hasta 3 semanas. La cópula que tiene lugar en estos días receptivos dura unos 30 minutos.