El lince ibérico se encuentra exclusivamente en zonas muy restringidas de España y Portugal. El hábitat principal del lince ibérico lo constituyen las áreas de bosque mediterráneo bien conservadas, aisladas de la actividad humana y con abundante matorral. El lince ibérico es el único carnívoro considerado como especialista en conejos. Esta especie le aporta del 80 al 90% de su alimentación. También consume anátidas, ungulados, perdices, micromamíferos y aves. La aparición de estas presas en su dieta depende de la época del año, de la disponibilidad de presas y de la zona. En la mayoría de los casos, vive de manera solitaria y nómada, mostrándose más sociable en la época de celo. Es un ágil cazador.