FOCOS
VOLCANICOS |
Desde
tiempos inmemoriales los volcanes han llamado la atención de los hombres y
en diferentes culturas han sido asociados al Diós del Fuego. Un volcán es
una colina con estilo más o menos cónica que se ha formado por la
acumulación de material magnético que el volcán arroja por su cráter y que
está conectada con el depósito de roca fundida (cámara magnética), que se
encuentra por debajo de la superficie terrestre. El material que se
acumula (conocido como magma), depositado en la cámara magnética, sale a
la superficie por presión. Previo
a la salida del magma, emergen gases y vapor de agua, lo cual es un primer
indicio de la próxima explosión volcánica. Causas
del vulcanismo. Existen
diversas teorías sobre el vulcanismo, entre ellas Hídricas y Tectónicas.
Hoy día se puede decir que las actividades volcánicas son muy estudiadas
pudiéndose establecer como principal causa los fenómenos orgánicos
(historia geológica de la tierra), en cuanto a la formación del volcán.
Por otro lado, la expansión de los pisos oceánicos, junto con el choque y
subdicción de esta placa con otra placa de diferentes densidades
(neotectónicas), permite la generación y liberación de ciertos minerales
que se van acumulando en las cámaras magnéticas hasta alcanzar las
condiciones necesarias para ascender por la garganta del volcán hasta el
cráter generado. Dónde
están los volcanes? Anteriormente
se mencionó que los volcanes están asociados a la tectónica de placas
(subducción), lo que nos lleva a pensar que en aquellas regiones donde
existe subducción hay vulcanismo. Así tenemos que en toda la región de
fuego del Circunpacífico se da un elevado vulcanismo desde Nueva Zelanda,
Filipinas, Japón, al Este de Rusia, Alaska y todo el Continente Americano.
Hay lugares como Hawaii donde no hay subducción, pero hay vulcanismo. Esta
zona, como en otros lugares (Italia, Galápagos, etc.), son puntos o plumas
calientes, donde existe una fisura sobre la cual el flujo de lava es
constante. Clasificación
de los volcanes Los
volcanes se pueden clasificar de 4 estructuras principales:
Como
ejemplo podemos citar el Aconcagua en América del Sur, y en Panamá, el
volcan Barú.
1. calderas 2. lagos
cratóricos 3. lagunas
de represamiento 4. cuellos
volcánicos 5. fuentes
termales Para
saber si un volcán está activo, es necesario el monitoreo sismo-volcánico,
además de otras pruebas como captación del pH del suelo, emisión de gases,
aguas termales y otros. En Panamá existen cerca de 40 aparatos volcánicos,
de los cuales 2 muestran actividad reciente. Estos son: Barú y La Yeguada.
Es necesario realizar estudios en estos aparatos para así poder acercarse
a una predicción o conocer mejor la etapa en la cual se
encuentran. A
nivel mundial hay volcanes menores como el Stromboli (Italia) que siempre
está en actividad y otros como el Krakatoa, en el Archipielago de la
Sonda, en Hawaii, que en 1883 estalló y únicamente dejó un fragmento de
cono. Los
más amargos recuerdos de destrucción los dejaron el Etna (Italia), Teide
(Islas Canarias), Fuji Yama (Japón), Kliuchiev (Rusia), Ras Dashan
(Etiopía), Hekla (Islandia), Atitlán, Acatenango, Pacaya, Fuego, Agua y
Santiaguito (Guatemala), San Miguel, San Salvador e Izalca (El Salvador),
Momotombo, Cerro Negro y Masaya (Nicaragua), Poás e Irazú (Costa Rica)
Cotopaxi y Chimborazo (Ecuador), Paracután, Popocatepelt y Citletepelt
(México) Maunakea y Mauna Loa (Hawaii), y en los últimos tiempos, el
Nevado del Ruiz (Colombia), con 23,000 personas muertas aproximadamente.
Prevención
y Preparación Las
erupciones y emanaciones volcánicas causan daños a la salud, debido a
ellas las personas pueden sufrir traumas, fracturas, quemaduras,
agudización de enfermedades respiratorias, irritación de bronquios,
asfixia por bióxido de carbono, intoxicación por ácido sulfúdrico y óxido
de carbono, además causan daños en las viviendas, por los incendios, caída
de los techos, por la ceniza que expiden, destrucción por lodo cerca de
los ríos, entre otras cosas. En
el aspecto de prevención, debe evitarse la construcción de urbanizaciones
en las faldas de un volcán, o simplemente reducir la vulnerabilidad del
territorio y de la población, aprovechando la fertilidad de la tierra para
la siembra, pero edificando sus viviendas lejos, es lo mejor indicado para
no correr riesgos. En caso de que se produzca el fenómeno de erupción, es
importante contar con un plan de emergencia que incluya aspectos como la
instalación de una red de monitoreo, definición del sistema de alarma,
viviendas construidas con techos muy inclinados, evitar el uso de la
madera, utilizar máscaras antigás para el personal de socorro y
verificación de los medios contra incendios a todos los
niveles. Recuerde
que aunque las zonas afectadas por la erupción de un volcán resultan las
más fértiles, no es recomendable que sean habitadas o pobladas nuevamente.
Siémbrelas pero no las habite. |